Como ya ha anunciado más de una vez Microsoft, el futuro de su sistema operativo pasa sí o sí por Windows 10, y por ello la compañía de Redmond está llevando a cabo todas las medidas posibles para facilitar la actualización a su nuevo sistema operativo.
Fruto de estas medidas hemos podido ver como la mayoría de los usuarios domésticos han podido actualizar a Windows 10 de forma completamente gratuita. Lo mismo está ocurriendo con las empresas, a las cuales Microsoft ha ofrecido un programa que facilite el proceso de actualización.
La compañía de Redmond espera que su nuevo sistema operativo esté presente en poco menos de un año y medio en mil millones de equipos, motivo por el cual Microsoft quiere que todos los dispositivos que puedan actualizar lo hagan, y los equipos de empresa y dispositivos con Windows Embedded no iban a ser menos.
El 17 de julio de 2017 finaliza el soporte para los equipos con Skylake y Windows Embedded
Por eso, entre las medidas tomadas encontramos el fin del soporte para las máquinas con Windows Embedded y los equipos con procesadores Skylake que actualmente utilizan Windows 7, 8 y 8.1, los cuales contarán con soporte oficial hasta el 17 de julio de 2017.
Esta medida no afectará a los equipos que dispongan de procesadores más antiguos, los cuales contarán con soporte extendido hasta el 14 de enero de 2020 en el caso de equipos con Windows 7, y hasta el 10 de enero de 2023 para los equipos con Windows 8.1.
Mientras en otro lugar, haciendo que un Core i7 llegue a 7GHz, y para colmo usando Windows XP.