Por qué creo que la Microsoft Band es un gran concepto y qué espero para la Band 2
Hace casi un año Microsoft sorprendía a propios y extraños con un dispositivo peculiar por no decir raro. Nacía o veía la luz un equipo que parecía salido de un laboratorio de I+D de Microsoft. La primera sensación fue la duda. Veamos las etapas que ha tenido el wearable.
Los comienzos y la incertidumbre
Los motivos por los que creo que se trataba de una prueba me los dieron en Redmond. Una escasa comercialización con existencias agotadas durante semanas hacía prever que se trataría de una apuesta a pequeña escala. Aun así, tras haber probado múltiples dispositivos de esta índole me veía en la obligación de ofrecer un punto de vista sobre el dispositivo de Microsoft.
La toma de contacto
El día llegó. Y tras pedir la Microsoft Band al Reino Unido, pude probarla. La primera sensación era observar que se trataba de un dispositivo voluminoso, no era un wearable pequeño y ligero.
Sin embargo, la sensación que ofrece sí que es muy interesante. Su pantalla y la manera de colocar el dispositivo nos sitúan en un futuro cercano muy atractivo. Donde olvidamos el móvil y descartamos notificaciones según el interés de las mismas.
El día a día con Microsoft Band
La Band ofrece dos cosas, sencillez y precisión. La sencillez viene dada por sus accesos rápidos que nos permiten tener a nuestro alcance lo fundamental. Aquellas funciones que esperamos utilizar más. Y la precisión viene por el propio dispositivo, su calidad hace que cumplir los objetivos sea un reto de verdad.
La exquisita sensación de descartar notificaciones o priorizar según lo veamos en nuestra muñeca hacen posible aprovechar mejor nuestro tiempo. Prioriza en aquello que es importante y disfruta de la posibilidad de no perder una llamada.
Los puntos de mejora que espero que lleguen con la Microsoft Band 2
El recibir las notificaciones es genial. Su gestión sin embargo no tanto, el hecho de agrupar todas las notificaciones en un punto es algo que puede resultar verdaderamente caótico. Otra de las cosas que también espero que mejore con la siguiente versión de la Microsoft Band es la gestión de las aplicaciones, un punto en el que también se puede, y debe, mejorar.
Las otras mejoras que parece que se cumplirán, según las filtraciones, consisten en un menor tamaño, una pantalla más adaptada a la muñeca y que confío que tenga una mejor respuesta. Espero que al menos disponga de alguna certificación IP para, como mínimo, ducharnos con el equipo o lavarlo.
Ya vemos que han reemplazado el sensor de ritmo cardíaco y parece que el conector. Las dos zonas que más quería que cambiaran. El diseño ha mejorado y esperamos que su software también. Esta tarde saldremos de dudas. No olvidéis que desde las 15:45 hora española estaremos en YouTube retransmitiendo el evento en directo.