Por todos es sabido que Windows se utiliza en muchos ámbitos, dado que el sistema operativo doméstico dominador, incluso en Apple.
Por ahora, la única empresa que no suministra equipos Windows a sus empleados es Google, la auténtica “enemiga” de Microsoft. Apple y Microsoft siempre han mantenido mutuo respeto, y no es para menos, desde que Microsoft la salvase de la quiebra allá por 1998, dotándola, además, de software como Microsoft Office o Internet Explorer. Ya sabíamos que iCloud se mueve con Microsoft Azure y Amazon Web Services, pero no imaginábamos esto.
Por otro lado, Windows siempre ha dispuesto de las mejores y más actualizadas herramientas para cualquier sector, tanto doméstico (música, video, imágenes, ofimática, etc.), como profesional (edición de video, producción musical, servidores, ciencia, matemáticas, ingeniería, etc.), y por supuesto, industrial. De hecho, la inmensa mayoría de sistemas SCADA de control de fabricación, así como sistemas de gestión empresarial se diseñan para Windows, pero no para OS X.
El enfoque de Apple siempre ha sido el de las profesiones liberales y artísticas, dotando de cierto glamour y una falsa sensación de superioridad y exclusividad a sus poseedores. Pero, cualquiera con sentido común, sabe que esto no es más nada que maniobras de marketing para crearse “una imagen” que te haga “sentir algo” cuando usas sus productos, como ocurre con algunas marcas de automoción. Y es que el rollo de la “experiencia” ya cansa, hasta Coca-Cola lo emplea y eso que sólo es agua con azúcar y aromas, nada más. Aun así, tampoco es que el resto de plataformas no estén preparadas para estas “profesiones artísticas y liberales”, es más, siguen superando a OS X en cantidad y calidad de software, incluso colándose GNU/Linux en ciertos sectores.
Windows, desde hace varios años (electrónica, mecánica, robótica, etc.), y cada vez más, como vimos en la Build 2014, se va enfocando también en los dispositivos con software empotrado, hardware dedicado, internet de la cosas e incluso, automóviles. Ámbitos profesionales muy relacionados con la temática de “lo industrial”. Tanto es así, que sus rivales tienen que rendirse a la evidencia y utilizar Windows, un “sistema inseguro, malvado y asqueroso” según sus detractores, que seguramente escriben o trabajan con él cómodamente sin problemas. Windows ya no es Windows 95/98 con ese núcleo MS-DOS obsoleto, por mucho que aún quieran seguir cegados algunos, al igual que Internet Explorer ya no es aquel Internet Explorer 6, 7 u 8. Cada vez son más los antiguos auténticos maqueros, no los switchers de 8 años hasta hoy, que reconocen el avance de Microsoft, la calidad de sus servicios e, incluso, un porcentaje cada vez más grande da el salto, ya sea porque Apple no cumple sus expectativas o porque su negocio así lo requiere, como ocurrió con un compañero nuestro (saludos a Juan Antonio Neodata, no olvidéis seguir nuestro canal de YouTube dirigido por él).
Apple ha abandonado a los profesionales, y aunque piensa que con marketing lo va a apañar, al final, el humo no puede competir con Azure, SharePoint, SQL Server, Dynamics, Office 365, Exchange, Windows Embedded, Expression Web, Expression Media, WebMatrix, Lync, Skype, OneDrive Pro, Windows Server, .NET y sus tecnologías, Visual Studio, IIS, Bing Translator para empresas, Microsoft Advertising, Microsoft Visio, Microsoft Project, Windows Intune, Microsoft Forefront, System Center Essentials, Surface Pro, etcétera, etcétera y etcétera. Comparémoslo con un sistema operativo móvil sin sistema de ficheros para administrar tus documentos, pero con iCloud Drive (y eso que este paradigma estaba acabado, ahora sabemos que Apple sólo se refería a ficheros locales, total, como tenemos internet en cualquier sitio a velocidad 4G, muy fiable para las empresas). Comparémoslo de nuevo con un sistema operativo de escritorio donde todo es facilidad a costa de libertad, no hay avance verdadero, con una tecnología de núcleo anticuada y soporte de hardware limitado, peor que el mismo FreeBSD que clona, con una política de corrección de errores desastrosa. Y, volvamos a comparar, con un “catálogo” de software cada vez menos profesional, eso sí, sólo del nicho música, fotos y videos, ya que iWork es una tomadura de pelo (hasta Lotus SmartSuite en los 90 era más avanzado). Lo dicho, facilidad a costa de libertad y opciones. Normal que los ordenadores y sistemas intenten ser bonitos, con fondos de pantalla llamativos, porque deben compensar lo demás de alguna manera. Sabemos que, en cuanto al marketing, está todo estudiadísimo, es la empresa que más cuida todos esos detalles, la “experiencia” de sentirse superior.
No llegábamos a pensar que Apple dependiese de Windows para cosas tan vitales, su maravillosa campaña de dispositivos iOS como dispositivos productivos entra en grave contradicción. Debe estar viniéndose abajo. BMW, Coca-Cola y otras empresas se han interesado por Surface Pro 3. Azure soporta plataformas corporativas tan vitales como SAP o Salesforce. Windows Phone empieza a ser bien visto, dadas sus últimas novedades dedicadas para el mundo empresarial, y algunas ya están dando el salto: CaixaBank, Chocolates Valor o Hyatt Corporation son ejemplos de ello. Para todo lo demás, echaros unas risas con relatos de humor y bilis como éste. Mantente profesional ;-)